Esta papilla suave, dulce y cremosa es una manera ideal de que tu bebé coma nueces. Las nueces tienen un gran valor energético, son ricas en grasas saludables, proteínas, oligoelementos, vitaminas así como calcio, fósforo y magnesio. Una vez que hayas comprobado que tu bebé no tiene alergia a este fruto seco, ofréceselo en esta rica papilla.
Cómo hacer papilla de avena, manzana y nueces para bebés
- Lava bien y ralla la manzana con un rallador grueso. Con piel y todo pero desecha el corazón de la fruta.
- En un cazo pon los copos de avena y añade medio vaso de agua (125ml). Deja cocer a fuego medio-alto durante 5 minutos.
- Añade la manzana rallada al cazo con la avena, remueve bien y cuece un par de minutos más.
- Pon las nueces en una picadora y tritura bien hasta obtener una pasta o harina. Si quieres ahorrarte este paso puedes usar directamente harina de nueces comercial.
- En el vaso de la batidora echa la avena con manzana y la harina de nueces. Tritura todo bien hasta obtener una textura cremosa o deja sin triturar si tu bebé tiene más de 7 meses y tolera bien las texturas.
- Pon la papilla en un cuenco, espolvorea un poquito de canela por encima y remueve bien ¡Ya puede comerlo tu bebé! ya verás como le gusta.
Trucos y consejos
- Si no tienes una picadora que te permita triturar las nueces puedes hacerlo en un almirez o comprar directamente harina de nueces.
- Gracias al aporte calórico de las nueces, esta papilla es perfecta para bebés bajos de peso.
- También puedes hacerla con almendras, avellanas, maní, anacardos, pistachos, castañas, etc. Pero que estén crudos y sin salar.
- Diferentes tipos de manzana le dan diferentes sabores a estas gachas. Si las quieres más dulces puedes usar manzanas reinetas, golden o pink lady, y para hacerlas un poco más ácidas puedes usar manzanas granny smith.