No es fácil que los bebés coman coliflor, la verdad es que incluso de pequeños suelen rechazarla ¿Será que el color no les llama la atención o el olor es muy fuerte? Quién sabe… pero siempre andamos buscando soluciones para que el bebé pruebe de todo y coma saludable. Con esta receta de coliflor rebozada lo conseguirás.
Cómo hacer coliflor rebozada crujiente
- Quita con un cuchillo las hojas de la base de la coliflor y el tronco central. Separa los floretes de coliflor y lávalos bien.
- Cuece la coliflor en una cacerola con mucha agua durante 10 minutos o hasta que esté tierna (pero no demasiado, debe quedar aldente). Escurre bien los trozos de coliflor y déjalos enfriar un poco antes de rebozar.
- Tritura un poco los copos de avena y maíz en una picadora. También puedes ponerlos en un mortero y machacarlos. Pon la mezcla en un plato.
- En otros dos platos pon la harina y los huevos batidos. Reboza cada trozo de coliflor primero en la harina, luego en el huevo y por último en la mezcla de copos.
- Calienta abundante aceite en una sartén a temperatura media y ve friendo la coliflor rebozada. Voltea los trozos para que se doren por todos lados.
- Cuando los saques de la sartén ponlos en un plato con papel de cocina para escurrir el exceso de aceite.
- Espera a que estén tibios y ya puedes dárselos a tu bebé para que los coma con sus manitas.
Trucos y consejos
- Esta receta también se puede preparar con brócoli.
- Debe ser un plato de consumo ocasional porque los fritos aportan mucha grasa.
- Puedes servirlos con una salsa suave (yogur, hummus, guacamole, etc)