Los cereales son de los primeros alimentos que se dan a probar al bebé cuando empieza la alimentación complementaria. En realidad la OMS dice que se pueden introducir las frutas, los cereales sin gluten o la verdura indistintamente, pero ya sea por tradición o por lo prácticas que son las papillas, la verdad es que casi todos empezamos por los cereales.
Entonces ¿cuándo y cómo podemos empezar a dar cereales a nuestro bebé?
- ¿Cuándo se empieza a dar cereales al bebé?
- ¿Qué cereales puedes darle a tu bebé?
- Cereales sin gluten, a partir de 6 meses
- Cereales con gluten, a partir de 7 meses
- ¿Puedo darle cereales a mi bebé de 4 meses?
- Alternativas BLW
- ¿Qué cantidad de cereales debe tomar?
- ¿Son imprescindibles las papillas industriales?
- ¿Cuál es la mejor marca de cereal para bebés?
¿Cuándo se empieza a dar cereales al bebé?
A partir de los 6 meses. La leche materna y las fórmulas infantiles cubren todas las necesidades nutricionales de tu bebé hasta esa edad, y es entonces cuando se introducen los alimentos sólidos para satisfacer las necesidades cambiantes de tu peque.
Los cereales infantiles suelen estar enriquecidos con hierro, zinc y vitaminas A y C. Sin embargo, este argumento de salud es puro marketing, ya que hasta los 6 meses las necesidades del bebé están cubiertas con la leche y, a partir de entonces, una dieta variada adaptada a su edad es suficiente para cubrir los nutrientes que necesita.
¿Qué cereales puedes darle a tu bebé?
A partir de los 6 meses podemos empezar con los cereales sin gluten que suelen ser los mejor aceptados por su sistema digestivo, y a partir de los 7 meses pueden probar los cereales con gluten.
Cereales sin gluten, a partir de 6 meses
Los principales cereales sin gluten que se usan en las papillas son:
- Arroz
- Maiz
- Avena
- Sorgo y mijo (menos habituales en nuestra cultura occidental)
- Quinoa (no es realmente un cereal, pero se usa como tal)
Cereales con gluten, a partir de 7 meses
A partir de los 7 meses nuestro bebé ya puede digerir el gluten y podrá probar papillas con:
- Trigo
- Cebada
- Centeno
¿Puedo darle cereales a mi bebé de 4 meses?
En principio no, a no ser que te lo recomiende directamente el médico o pediatra. Por mucho que las abuelas nos digan que antes se daban papillas a partir de los 4 meses, o que el bebé pasa hambre (no es cierto).
Gracias a los últimos estudios médicos las recomendaciones han cambiado y se sabe que hasta los 6 meses las necesidades del bebé están cubiertas con la leche. Además existe un riesgo de alergia más elevado si se introducen los nuevos alimentos antes de tiempo, ya que a esta edad todavía está madurando el sistema digestivo, renal, nervioso e inmunológico del bebé.
Alternativas BLW
Si escoges no dar triturados a tu bebé también existen muchas opciones para que tome cereales:
- Pasta bien cocida: macarrones, espaguetis cortados, sopa
- Arroz bien cocido
- Cus cus
- Un trozo de pan
- Tortitas
- Galletas caseras sin azúcar
- Bizcochos
¿Qué cantidad de cereales debe tomar?
Al empezar la alimentación complementaria se dan cantidades muy pequeñas, el equivalente a 2 o 3 cucharaditas de papilla. Sólo queremos que pruebe. Unos días más tarde puedes aumentar las cantidades (4 a 5 cucharaditas).
Recuerda que no todos los bebés comen igual. Al igual que los adultos, algunos comerán más que otros debido a su apetito individual. Intenta no obsesionarte con las cantidades que come tu bebé, la mayoría comen la cantidad justa de alimentos que necesitan.
Hay que tener cuidado con la cantidad de cereales, ya que ofrecerlos en exceso podría provocar un riesgo de sobrealimentación y un desequilibrio nutricional al aumentar la ingesta de hidratos de carbono y reducir la de leche, que es esencial para el bebé. Además, administrados en exceso, los cereales pueden provocar molestias digestivas.
Ofrece siempre al bebé el biberón o la leche materna antes de darle una comida sólida, para que esta última no provoque una reducción de la ingesta de leche.
¿Son imprescindibles las papillas industriales?
La verdad es que no, es muy fácil hacer papillas de cereales en casa. Y si no lo crees pregunta a las abuelas, que no tenían acceso a este tipo de productos infantiles y lo hacían todo en casa. Las ventajas de preparar las papillas para tu bebé son:
- Sabes exactamente los ingredientes que llevan, sin azúcar o aceites añadidos. Puedes ir añadiendo cereales nuevos poco a poco y si surge algún tipo de alergia te resultará más fácil identificar cuál la ha provocado.
- Es más barato. Una papilla industrial cuesta entre 10 y 15€/kg, mientras que las harinas de cereales cuestan entre 1 y 2€/kg. El enriquecimiento que llevan las papillas de farmacia en hierro y vitaminas no es necesario para un bebe sano, y en todo caso no justifica ese sobreprecio.
- Controlas la textura. Puedes empezar con papillas muy líquidas cuando tu bebé es pequeño y luego ir triturando menos los cereales para acostumbrarle y que no rechace diferentes texturas más adelante.
- El bebé aprende a comer con diferentes sabores (los preparados industriales de una misma marca siempre saben igual) y no se acostumbra al sabor dulce.
¿Cuál es la mejor marca de cereal para bebés?
Las papillas industriales son muy cómodas, no lo vamos a negar, y no todas tenemos la posibilidad de estar preparando papillas caseras. Si te decides por esta opción lo mejor es elegir unos cereales sin azúcares añadidos ni producidos (hidrolizados).
Por suerte ya hay varias opciones en el mercado con cereales sin hidrolizar. Las marcas que ahora mismo tienen papillas con 0% azúcares añadidos ni producidos son:
¿Qué significa “sin azúcares producidos”? Pues los cereales de las papillas industriales suelen estar hidrolizados o dextrinados. Este proceso convierte los hidratos de carbono complejos, en otros mucho más pequeños como los azúcares simples. Por eso, aunque no lleven añadidos estas papillas tienen un elevado contenido en azúcares.
Ante la duda, mira siempre la tabla nutricional que aparece en el lateral de la caja de papilla y asegúrate de que tenga menos de 1g de azúcares por cada 100g de cereales.
Y recuerda que, tanto si decides darle cereales como si no, la leche debe seguir siendo el alimento principal de tu bebé hasta el año de edad y que sólo a partir de los 9 meses debe reducirse la cantidad de leche, para permitir un aumento gradual del consumo de alimentos sólidos.