Estás albóndigas vegetales son ideales para comer con las manos y disfrutar a mordiscos. Su textura es muy blandita, y se trata de una receta con el aporte de todos los nutrientes necesarios.
A las vitaminas que contienen las judías verdes, más los carbohidratos de la patata que aportarán energía a tu peque, se suman los nutrientes de la quinoa que aporta proteínas de origen vegetal y fibra.
Cómo hacer albóndigas vegetales de patata
- Lava las judías, retira los bordes y córtalas en trozos.
- Pela la patata, lávala y trocéala en dos o tres partes.
- Pon en una olla agua a hervir, cuando entre en ebullición añade la quinoa, las patatas y las judías y deja que cuezan durante 20 minutos. Escurre.
- Cuando haya enfriado, pon en un bol los ingredientes y aplástalos con la ayuda de un tenedor.
- Haz bolas con la mezcla usando tus manos, también puedes hacerlo con la ayuda de dos cucharas. Con estas cantidades de ingredientes saldrán unas 4 ó 5 bolitas.
- Añade un chorro de aceite a una sartén y calienta a fuego medio-alto.
- Pon las bolas en la sartén y gíralas hasta que queden doradas.
- Espera a que enfríen y ¡a comer!
Trucos y consejos
- Puedes usar judías congeladas, en ese caso añade un puñado.
- Aumenta la cantidad de los ingredientes y podréis disfrutar de estas albóndigas toda la familia.
- Puedes cambiar la verdura, o añadir alguna más que le guste a tus hijos: guisantes, zanahoria, coliflor, pimiento, etc.
